El Gobierno de Cataluña ha anunciado una reducción generalizada de las restricciones en el uso del agua gracias a las recientes lluvias, que han incrementado las reservas de los embalses. Esta mejora ha permitido levantar el estado de emergencia en 34 municipios del Alt Empordà, así como en Riudecanyes y Duesaigües (Tarragona), permitiendo un aumento en los consumos domésticos y agrícolas.
No obstante, el área metropolitana de Barcelona y Girona se mantiene en fase de alerta hasta que los embalses del sistema Ter-Llobregat alcancen el 60% de su capacidad. La portavoz del Gobierno, Sílvia Paneque, ha indicado que se espera avanzar en la relajación de medidas en las próximas semanas, dependiendo de nuevas precipitaciones.
Paralelamente, el director de la Agencia Catalana del Agua, Josep Lluís Armenter, ha manifestado que, si las lluvias continúan, se podría disfrutar de un verano sin restricciones, ya que los embalses han alcanzado el 50% de su capacidad.
Esta situación representa una mejora en las perspectivas para el mantenimiento y la creación de jardines públicos y privados, que podrían tener una temporada de riego normal después de dos años difíciles.
A pesar de la mejora, el Gobierno pide prudencia, recordando que los niveles actuales de los embalses aún están por debajo de la media histórica.